agosto 06, 2005

Yo también conozco a una loca.

Apenas me levanté hoy visité a mi amigo Garganta de Lata (que cada día me comprende menos, pero bueno) y visité el blog de la Katamarga, que tuvo de nana a la nana asesina de Melipilla. Gracias a Dios ella y su familia se alcanzaron a salvar (imaginense que cuidaba a su abuelita que sufre de demencial senil). Entonces me acordé de mi propia historia con una loca, pero usando la palabra en el sentido de alguien sicótico, sicopático. Y para más remate anda suelta aún.
La conocí a principios de este año, cuando comenzé a estudiar de día. Yo sabía que me iba a encontrar con puros cabros chicos salidos de 4 medio, que se rien de puras tonteras, hasta que el primer día de clases la vi y dije: bacán, no soy la más vieja. Creo que la lola tiene 33 (uno más que yo) pero por su "look" (de negro y ropa grande) se ve mayor. Como aparte de furiosa a veces no pesco sin darme cuenta, conversé con ella de alguna u otra cosa, cuando me veía tomando los antidepresivos, y me contaba lo que ella tomaba y otras cosas más que no las quiero decir para que no se cache quién es la lola. Le voy a poner Pepita. Pepita me contó que ella tomaba hacía 5 años antidepresivos, y como yo soy medio avispá, me pregunté dos cosas: ella tiene un problema siquiatrico de verdad, o su siquiatra es como las guéas. Esto lo puedo decir con propiedad porque tengo un MBA en depre y cambios bruscos en mi vida (más que cambio brusco, me quedó la caga hace unos años) y los tratamientos con pastillas son eso: tratamientos, que junto con la sicoterapia, vas dejando de a poco para vivir sin ellos y aceptar lo que no puedes y por lo que te da depre. Ya me puse pajera.
Pasaron unos meses y me hize un grupo de amigas a toda raja, y también está medio incluido un lolo, que como característica principal es amable con todas las mujeres, asi medio caballeroso, no te mira el poto o las pechugas en tu cara, lo que se agradece. Este lolo, que llamaré Martin, también fue amable con pepita: conversaban por msn, si iban por el mismo camino para la micro iban juntos, cosa que Martin hace con casi todas, hasta que él le entrega un material de estudio y no le cobra.
Yo no le creía al principio, pero cuando vi 30 mensajes de texto que le envíaba en forma diaria la Pepita, como que me entré a asustar. Martin nos decía que la había borrado del msn, que no le contestaba las llamadas, que no la pescaba, básicamente. Hasta ahí, problema de él. La Pepita lo sicopatiaba, pero como uno conoce minas así...
Hasta que tres de mis compañeras cacharon que se habían metido a su correo, borrandole los favoritos y usando su nombre en el msn para puro hablar tonteras. Como yo soy avispá, tengo una clave de letras y números, pero algunas de estas lolas (amigas de Martin) tenían clave de hotmail su nombre. Coincidía que justo las tres (yo era la cuarta) que se juntaban con Martin, les invadieron su hotmail y a veces las llamaban amigos para preguntarles: oye, que gueá te pasaba anoche? Una de mis compañeras es muy dulce, su nick era Mariposita, y la Pepita (¿quién más sino?) le cambió su nick a Mariposota, y como yo soy muuuuuy avispá, un día me hice la gil y le pregunté algo que sólo mi amiga y yo nomás sabemos, y la Pepita me escribió: ja, ja, tú no sabes quién soy. Y se desconectó. También, como Mariposota, le dijo a un prospecto de mino de la verdadera Mariposita, que ahora estaba mala, y este lolo le sonó raro, y ella le dijo que ahora cobraba.
Otra compañera tuvo que crear otro correo y pedir disculpas por lo que no había dicho y contar la historia de Pepita. Estos hechos no eran coincidencias, ni cagando.
Pero la gueá más patética que le he visto, no, le he visto peores, es que un día nos quedamos estudiando hasta las 4, por ejemplo. Nosotras cuatro y Martin. Y nos seguía a todos lados. Fuimos a la biblioteca, allá llegó, fuimos al casino, allá estaba. Lo peor es que no había nadie, porque en unas horas comenzaba la jornada vespertina, pero todos los del día se habían ido. Y la Pepita fumaba, fumaba, fumaba, con mucha ansiedad.
Martin se molestó, porque ya estaba bueno ya, y le dijo (no frente a nosotras): loca, yo no te pesco, déjame tranquilo. Fue harto desagradable, sobre todo mis compañeras más chicas se asustaban, y yo les decia que en el fondo ella está enferma.
Averiguando por aquí y por allá, le dijimos a Martin que hablara claro con ella, que le explicara porqué no quería ser su "amigo". Lo que yo supe de esa conversa es que Pepita le decía: pero dime porque no califico como tu amiga, es porque no vivo Plaza Italia para arriba (¿?), porque soy fea. Y, según nos contó Martin, él le decía que no tenía porqué darle razones, que sólo eran compañeros.
Después de eso desapareció creo que una semana y media, y cuando apareció le dijo a un compañero, pendejo también, que había estado en Londres, justo para la semana de las bombas.
Como no falta el profe buena onda, a él le habíamos contado algo y mostrado las conversaciones de msn haciéndose pasar por alguna de mis compañeras. Ese tiempo Pepita le decía a todo el que la quisiera escuchar que no creyeran lo que Martin dijera de ella, cómo si algunos de mis pendejos compañeros le importara. Llegó a decirle a este profe buena onda, esto pa' callao, que Martin la perseguía, no la dejaba en paz...¿?
Vino con la mamá a hablar para dar las pruebas que le faltaban. ¡Con la mamá! ¡Una mujer de 33 años!
Esta semana de vaca un compañero me contaba que estaba medio terminado con la polola pero que le daba pena porque ella lloraba y yo como soy más vieja le dije algunas cosas basadas en lo que me ha pasado. Y después me dice: lo peor de todo es que le conté a la Pepita, y me ofreció pololear conmigo, o ser mi amante. Yo le conté que tuviera cuidado porque ella no es normal, de hecho Pepita le repite una y otra vez: no creas lo que te digan Martin.
Este lunes comienza el segundo semestre. Con la Pepita como compañera...
Y no estoy gueviando, es la pura verdad.

4 comentarios:

Cazador Oculto dijo...

me gusta mucho la forma en la que escribe. Muy entrete. es una lata tener compañeros asi de demenciales, pero de todo hay en la viña del seños como se dice. Bueno el pequeño fragmento de artaud, fue importante en mi adolescencia me hizo penzar en la responsibilidad social que uno tiene y otras cosas.

Claudia Corazón Feliz dijo...

Una cosa es que no me importa para que usen mi blog, pero que un gringo saco de gueas haga publicidad...Puta que me rabia.

garta dijo...

borralo con toda tu furia... y quedaste loca con la loca de melipilla.
NOs leemos
y gracias por agregarme a tus links...

Go For It 74 dijo...

Furiosa,

Pucha... de todo hay en este mundo, incluso minas sicópatas, y que le pueden tocar a uno como compañeras de estudio o lo que sea.

Pescar poco no más, no meterse en cahuines, y ánimo.

Saludos